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miércoles, 27 de octubre de 2010

Dolor de unas... Placer de otros







“La excisión constituye un intento de conferir un rango inferior a las mujeres al señalarlas con esta marca que las disminuye y que es un recordatorio constante de que sólo son mujeres, inferiores a los hombres, de que ni siquiera tienen ningún derecho sobre su propio cuerpo ni a realizarse física o espiritualmente...” Tomás Sankara, presidente de Burkina Faso 1983-87.

La mutilación genital femenina (MGF) (o excisión) es una práctica muy común en más de la mitad de los países de África. A pesar de ser una creencia muy arraigada, se debe tomar en cuenta que no es como la circuncisión masculina, ya que la femenina trae problemas a corto, mediano y largo plazo, incluso puede provocar la muerte.

Para hacernos una idea más clara de lo que esta riesgosa práctica significa, tenemos que existen varios tipos de mutilación de los genitales femeninos:
  • Tipo 1: consiste en la escisión o ruptura del clítoris total o parcialmente, este tipo de mutilación se conoce como clitoridectomía.
  • Tipo 2: es la ruptura del clítoris con la escisión parcial o total del labio menor.
  • Tipo 3: es conocido como infibulación. Este tipo en particular consiste en remover una parte o la totalidad de los genitales y suturar (en varios casos con espinas) el orificio vaginal. 

    Este se cierra con la intención de que la mujer pierda la libido y no tenga relaciones sexuales prematrimoniales, y que además, cuando está casada, le sea fiel a su esposo. El orificio que se deja abierto mide apróximadamente medio centímetro, para poder orinar o menstruar. En el procedimiento no se utiliza anestesia ni antisépticos, y en la mayoría de los casos es necesaria la ayuda de 3 ó 4 personas para que sujeten a la niña (si, NIÑAS), ya que el proceso es sumamente doloroso.
Las mujeres sometidas a la infibulación,  deben ser nuevamente “operadas” para poder abrir un poco más el orificio vaginal, esto para poder tener relaciones sexuales o dar a luz, muchas de ellas son re-infibuladas. 

Sin embargo, esta práctica (que según la perspectiva de la Cereza Prohibida viola todos y cada uno de los Derechos Humanos y de Reproducción que tenemos las mujeres) no termina aquí:
  • El tipo 4, consiste en pinchazos, heridas o incisiones, estiramiento y cauterización del clítoris, también raspadura del orificio vaginal o corte de la vagina, y además la introducción de sustancias corrosivas dentro de la vagina hasta provocar el sangrado.
El tipo de mutilación más utilizado es el segundo, representando un 80% de los casos, pero la infibulación es el procedimiento más común en países como Somalia y Sudán.

Todos los tipos de mutilación tienen consecuencias, tales como:
  • Hemorragias, que se presentan casi inmediatamente y pueden causar la muerte.
  •  Infecciones, ya que dichas mutilaciones se llevan a cabo en lugares no muy limpios (por decirlo a grandes rasgos), además de usar navajas de afeitar o pedazos de vidrio afilado los cuales no están desinfectados.
  • Retención de orina debido al miedo de experimentar algún dolor al momento de orinar.
  • Dolor crónico, pérdida de sensación y pérdida de movilidad. El proceso de dar a luz se complica bastante debido a que la piel cicatrizada es inelástica, haciendo que la mujer haga un esfuerzo de más, prolongando el nacimiento más de lo normal y poniendo en peligro la vida del bebé.
Buscando más información sobre este tema, encontré una página donde se exponen las causas por las cuales se realiza la MGF.
 Estas viles excusas no son suficientes para justificar esta "tradición" tan inhumana y cruel, y a pesar de los esfuerzos de instituciones que velan por eliminar la MGF, este atroz procedimiento parece difícil de erradicar, debido a que muchos están de acuerdo en continuar realizándola por ser vista como parte de sus tradiciones e identidad.
La humillación a la que están sujetas estás pequeñas niñas es otro de los efectos secundarios, la estabilidad mental de las mujeres sometidas a este proceso es puesta en grave riesgo.


"La experiencia de la MGF se ha asociado a una serie de desórdenes mentales y psicosomáticos como alteraciones del apetito y del sueño, pesadillas, ataques de pánico, dificultades para la concentración y el aprendizaje. Al crecer, pueden experimentar sentimientos de pérdida de autoestima, depresión, ansiedad crónica, fobias, pánico e incluso alteraciones psicóticas. Muchas mujeres padecen sus problemas en silencio, incapaces de expresar su dolor y su miedo." Consecueancias psicológicas de la MGF, Website oficial de la "Lucha Contra la MGF".

Es fácil volver el rostro con asco y decir "que dicha que esto pasa tan lejos de mi". Pero esta variable ya no entra en juego. Actualmente las colonias que albergan inmigrantes,  localizadas en Europa, América del Norte y América del Sur han traído consigo este macabro componente de su cultura. 

Como mujeres, debemos asegurarnos de luchar por nuestra integridad como seres humanos, y cómo genero tenemos que luchar por la integridad física y mental de todas. 





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